Con la llegada del frío BAXI propone consejos básicos para una climatización eficiente en invierno
BAXI, compañía líder en equipos de climatización y ACS para el hogar, propone una serie de sencillos consejos para garantizar el mayor confort térmico con la bajada de las temperaturas.
En España, la calefacción representa cerca del 70% del consumo energético de una vivienda. En los meses de invierno se produce un aumento exponencial del consumo de calefacción para mantener un óptimo confort, por ello, es imprescindible tener en cuenta algunas premisas para no perder el calor generado y hacer un uso eficiente de la energía.
En los meses de invierno, durante el día es recomendable mantener la vivienda a una temperatura de entre 19 y 21°C, y reducirla a 15-17°C durante la noche. En este sentido, el uso de termostatos programables ayuda de forma significativa a mantener la temperatura correcta y evitar un derroche energético innecesario.
Durante el día es recomendable subir las persianas para que entre la luz solar y contribuir a aumentar la temperatura de forma natural, recordando bajarlas durante la noche para un mejor aislamiento.
Cuando se prevean salidas del hogar de varias horas, la temperatura puede reducirse hasta 15°C, para mantener un nivel térmico mínimo. Es mejor mantener una temperatura mínima para evitar tener que hacer un sobre esfuerzo energético posterior para recuperar los niveles de confort térmico.
En cuanto al consumo energético, es importante tener presente que cada grado que aumenta la temperatura ambiente incrementa el consumo de energía un 7%, aproximadamente.
A la hora de definir la instalación de los radiadores, la mejor ubicación para un buen funcionamiento, es debajo de las ventanas. Además, para aprovechar al máximo el calor real que emiten los radiadores, se recomienda evitar taparlos u obstruirlos con ropa o similares.
El mantenimiento de los equipos de calefacción y la verificación del correcto funcionamiento de la instalación será fundamental para evitar cualquier imprevisto durante los meses de invierno.
Asimismo, el cambio de una caldera convencional por una solución de condensación, en cumplimiento de la nueva normativa europea ErP, permitirá contar con las mejores prestaciones y lograr un ahorro superior al 30% de la factura energética (lo que equivale a un ahorro anual de 300 euros de media).